El Guadalupe-Reyes

México es un país de tradiciones. Nos encanta el tequila en septiembre y el cempasúchil en noviembre. En diciembre le hacemos a un montón de cosas pero nuestro favorito es en Guadalupe-Reyes.

Yo no triunfo con la intensidad que demanda esta tradición… ya no. Pero sé que muchos de ustedes sí, porque tienen otro horario, otras fuerzas, más amigos, otras edades, otros ímpetus o un empleo mejor remunerado… Porque todavía les dan ganas, pues. O porque celebran todos los días, nomás que entre el 12 de diciembre y el 7 de enero lo hacen con más conciencia.

En últimos tiempos nos hemos vuelto súper adictos a la ayuda que tuiter nos proporciona respecto a los alcoholímetros. O bueno, se han vuelto quienes beben y conducen. Como ya sabe usted, yo dejé de usar el coche hace como 12 años y sólo una emergencia me hace manejar —no lo digan muy fuerte porque nunca renové la licencia de conducir—. Y sí, cuando paseo con amigos con coche me fijo por dónde hay que ir para no topar un retén de la alcoholemia, pero es mala política y todos lo sabemos bien. No sé (ni me voy a fijar) si el número de borrachazos a disminuido desde que instauraron el alcoholímetro. Me imagino que sí, y quiero pensar que se debe más a que nos hemos hecho más concientes, y no a que quienes están ciegos de tan pedos son detenidos y pasan la noche en “El Torito”.

Pues bueno, el chiste es que, como dice el tequila: “Conocer es no excederse”. Pero como ya sabemos que quienes se exceden seguirán excediéndose, apelo a la inmensa sabiduría de la televisión y le suplico: “Si toma, no maneje”. Sí, me preocupa su seguridad y la mía y la de mis padres y la de mis hermanas. Recuerde que son básicamente los borrachos descuidados los que vacían estas fiestas de toda paz y alegría. Nadie quiere tener un accidente, ni terminar en la delegación o en el hospital. Nomás es cosa de acordarse cuando ya se le pasaron las cucharadas.

Y claro, papá gobierno ya está haciendo su parte. No es que Mancera desconfíe de nuestro sentido común, sólo que hay 17 mil policías que no tienen nada mejor que hacer. Así que habrá alcoholímetro las 24 horas desde ayer en la mañana y hasta que lleguen los Reyes Magos, y va a haber un montón y la intención no es chingar sino que usted no mate ni sea matado.

La verdad es que hasta es práctico, si lo piensa detenidamente: Dejar el coche guardado para salir de fiesta le ahorrará kilómetros recorridos y postergará el siguiente servicio, ahorrará gasolina, contaminará bastante menos, no perderá tiempo buscando estacionamiento, reducirá el riesgo del cristalazo y de la cajuela forzada, se evitará el trato de valets, viene-vienes, y que los amiguetes lo agarren de autobús escolar. Pero más importante aún: podrá celebrar como a usted le gusta, con muchas ganas, muchas carcajadas, ¡y muchas piñas coladas!

Busque el sitio de taxis más cercano a su hogar, hágase del teléfono de algún radiotaxi de confianza y, sobre todo, conserve la paciencia. Es mejor diez minutos tarde al reven que pasar la noche enjaulado con un montón de borrachos desconocidos.

Si usted anda por aquí cerquita, le dejo un par de números de radio taxis que nunca me han dejado tirada:

DELTA: 5771-37731 /3741 / 5862 / 3176

TAXIMEX: 5634-9912

Etiquetado:

Deja un comentario